La SegundaVasco Moulian: “Estamos asumiendo el costo de ser pioneros en flexibilizar la TV”Sobredosis de “Los Simpson” durante el verano; el triunfante “1810” repartiéndose también por toda la programación y el inusitado debut de la telenovela “Cuenta conmigo”, a sólo 48 horas de haberse cerrado la última jornada del Festival de Viña, han sido algunas de las sorpresas que ha brindado la cartelera de Canal 13 en lo que va de este año.
Y suma y sigue: el sagrado horario de los noticiarios (que sólo había sido alterado por Mega cuando programó“Casado con hijos” a las 21.30) se desparramó, permitiendo a la telenovela de la tarde —que, a todo esto, había debutado en “1810”— seguir cascando hasta las 21.10, 21.15, 21.20… postergando al noticiero central.
¿Golpe a la cátedra o la cartelera del 13 se volvió loca?El director de Programación y Eventos Estratégicos de Canal 13, Vasco Moulian, sólo se ríe. Y aclara: “desde esta semana «Teletrece» empieza a las 21.13. “Definitivo. Respuesta definitiva”.
— Implica un hábito poco usual ver noticias a partir de las 21.13 horas. —Ese horario no tiene que ver con una improvisación sino con un estudio. Las personas están llegando más tarde a sus hogares. Eso hace que estemos desplazando algunos minutos la programación para más tarde. Hay horarios que se han movido y nosotros hemos tenido la flexibilidad para hacernos cargo.
—La televisión dejó de ser impuesta. Estamos tomando en consideración sobre todo lo que le está pasando al espectador.
Actor y director de teatro, Moulian lleva 10 meses en el cargo.
Premunido de muchos papeles (aunque lo que usa casi 24 horas es palm y computador) recibe a “La Segunda”. Y con mucho sentido de la oportunidad y del humor, propone tomarse la foto en el living de Los Simpsons, que decora el 4º. piso desde que el canal hiciera la premiere del filme en 2007.
[color:8d0d="#0000FF"]“Pagamos por cada una de la repeticiones (Simpson)” —Dicen que Fox está molesto por tanta repetición… —¡Al contrario! Ellos están fascinados porque les pagamos por cada una de las repeticiones. Cada repetición es cash para ellos.
—Hacerle caso a la audiencia podría leerse como la dictadura del rating. —No creo. Pero está pasando algo nuevo: la gente está llegando más tarde a sus casas, los niños se están acostando más tarde. Y cuando se traslada el visionado, uno tiene que estar atento al llamado de atención que te está haciendo la audiencia y hacerte cargo de eso...
—Pero también existe programación antes de ese horario y tienes que hacerte cargo de ella también... —Claro y con el mismo respeto...
—Hay telespectadores que opinan que tanto cambio es una falta de respeto. La misma Diana Bolocco dijo “estoy mareada” porque no sabe a qué hora va su programa. Pasa que el telespectador no se encuentra con sus programas... —...Hasta que llega el momento en que éstos se estabilizan y nos damos cuenta que el telespectador sintoniza con lo que tú estás haciendo. Lo importante es entender que dentro de nuestra parrilla tenemos programación coherente, de la cual nos sentimos tremendamente orgullosos. Este Canal 13 es un canal del cual yo siento un orgullo tremendo de ver la programación. A mí no me da vergüenza en ningún minuto prender el Canal 13.
—¿Alguna vez te dio vergüenza? —(Duda un momento)… De otros. De Canal 13 no recuerdo y si recordara no te contaría. (Se ríe)
—¿Se mantiene “Teletrece” a las 21.13 por un mes, un año? —Sería un error casarme hoy día y de una pretensión y arrogancia tremenda pensar que la audiencia no va a cambiar de nuevo. Y hay que ser muy hábil para entender y ser humilde, en estos momentos en que nos está tocando ser líderes, para entender que mañana o pasado mañana esto puede cambiar. La televisión ya no puede dejar pasar minutos. Es una industria muy competitiva.
—Esto es una tendencia. Nos tocó ser los primeros, pero hay otros programas han cambiado también tres veces de día. TVN ha cambiado los coros varias veces de horario. Se flexibilizó esta cosa que parecía que antes no se podía tocar. A nosotros nos tocó a lo mejor ser los primeros, los pioneros en flexibilizar la TV y ese es el costo, tener que dar estas explicaciones.
[color:8d0d="#0000FF"]“Nunca he entrado a una isla de edición a ver «Cuenta conmigo»” —Se afirma que cuando recién partió“Cuenta conmigo” algunos capítulos fueron editados por ti. —¡No! Es más, creo que nunca he entrado a una isla de edición a ver “Cuenta Conmigo”. Sin embargo, me quedo todos los días a su salida al aire. Yo confío plenamente en una gran editora, la Sole Rojas. Si una cosa que me caracteriza a mí es delegar. Este es un trabajo que si no fuera por Yuri (Alejandro) Santelices, mi gerente de programación. Si no fuera por María Ester, directora de contenidos. “Cuenta Conmigo”es una teleserie de la cual me siento tremendamente orgulloso de tenerla en pantalla. Es decir, qué bueno que volvimos a hacer una teleserie alucinante, bien actuada, bien iluminada, donde me siento orgulloso, esto es producto de un equipazo.
—¿Qué pasa cuando un producto del cual estás orgulloso no se cruza con un resultado equivalente en el rating? —Bueno, pasa que es lamentable, pero esta es una teleserie que tiene un share comercial de 8 puntos, que saca sobre 16 puntos de rating. Está cada día más peleado...
[color:8d0d="#0000FF"]“No creo que seamos el único canal que edita las películas” —Eso también indica que el público que está viendo las telenovelas no es mucho. Son 16 y 18 puntos... —Creo, y ojalá esté equivocado, que el prime se aplazó. Hoy es a las diez. Ni siquiera es el horario de las noticias. Cinco años atrás estábamos hablando de noticieros de treinta y tantos puntos. Hoy día estamos hablando de teleseries de 18 y 17 puntos, pero además los programas de 30 puntos son de las 22.30 horas en adelante.
—Se ha criticado el uso y abuso de “1810” a toda hora, especialmente en el matinal. Y qué decir de “Los Simpson”… —Es una crítica desinformada porque del matinal sólo el 20% es “1810”. Y cuando dejamos de dar imágenes de archivo, no bajamos, sino que la gente sigue con nosotros. Quiere decir que el televidente ha empatizado con nuestros rostros y con ese formato.
—Los Simpson hoy va únicamente en la tarde, salvo de 13 a 13.45. Luego vuelven de 18.30 a 20 horas. El mito de “Los Simpson” se generó el verano cuando los teníamos toda la mañana.
—El domingo 1 de marzo “Lilo y Stitch” fue cortado en 20 minutos. ¿Se puede intervenir así una película? —No sé el caso. Seguramente teníamos algo que hacía que necesitáramos que justo la película durara 55 minutos. No creo que sea el único canal que edita las películas. No he recibido ningún reclamo, ni formal ni informal.
[color:8d0d="#0000FF"]Sobre la salida de “Don Juan y su bella dama”: “Se buscará un mejor momento” —¿Cuál fue la idea de programar “Don Juan y su bella Dama” a las 3 de la tarde? Es un horario en que tú mismo estás diciendo que no mucha gente ve televisión y es además una teleserie nocturna. —(...) Teníamos una necesidad programática en ese horario y fue la teleserie... Yo siento que si tenemos una teleserie de la calidad de la del Benja (Vicuña)… Yo no quiero decir con esto que nunca más la vamos a dar, pero nos dimos cuenta que en este momento no empatizó con la audiencia. Por ende, la teleserie se guarda y se buscará el mejor momento...
—La hora en que se programó también influye... —No tengo ninguna certeza. Una cosa que he descubierto ahora es que esas certezas ya no existen. Si tú hubieras visto el primer capítulo de “La Doctora Polo” y tú eres directora de programación, ¿piensas que va a ser lo que es hoy día? El programador antes era una persona que decía “OK” y se iba para la casa. Eso se acabó. La audiencia es distinta. Para ser más honesto todavía, la teleserie la puedo probar en el verano a las doce de la noche y ¿si no empatiza de nuevo? ¿La saco o sigo con el error?
—Pero también hubo un tema de ausencia de promoción. Siendo Benjamín Vicuña uno de sus protagonistas no supo que estaba en cartelera hasta después que salió del aire... —Bielsa dijo algo notable. Entró Iturra y jugó siete minutos y en los camarines Bielsa dijo: “la embarré, qué hago”. Pensó: “voy a sacar a Iturra y voy a poner a Cereceda”. Cuando le preguntaron por esto, dijo: “¿Y usted quiere que yo, luego de cometer un error, siga con el error? A mí me parece peor eso que enmendar el error”.
—¿Y cuándo la embarró Vasco Moulián? ¿Cuándo fueron esos 7 minutos? —Puede ser que haya sido un error programar... No, qué puede ser, fue un error...
—¿Programar a las 3 de la tarde “Don Juan…”? —No sé. Puede ser, no tengo la certeza. (Confiesa que se probó la telenovela, sus 3 días al aire, en 3 horarios distintos).
—Hay ciertas estructuras que la gente necesita, horarios estables. Sucedió el año pasado con “La Ofis”… —“La Ofis” era un producto de nicho. Sus fans tienen un perfil intelectual y socioeconómico un poco más alto. Pero, puchas, tú no puedes programar para la élite.
—Porque la televisión es masiva... —Sí, pero con nuestro proyecto, que es bien claro, que tiene que ver con encontrarse con la familia, con “Los ochenta”, con “El TV o no TV”, con tener a Vodanovic a un mes del Festival.
—Nadie me pregunta a mí por qué Canal 13 le ganó por ocho puntos de diferencia a TVN (en el Festival) dando exactamente lo mismo. No es casualidad. Nosotros nos fuimos dos semanas antes y después fuimos los primeros en partir el matinal, estuvimos una semana con “La movida” antes. Es construcción de emociones. Al final, lo que tú estás haciendo tiene que ver con el corazón de los chilenos. Tú capturas corazones.
—¿De qué se trató esa reunión que tuviste con los actores de “Cuenta conmigo”? —Es una reunión privada de la cual no puedo contar detalles. Yo los escuché. A mí me gusta mucho el rating, y les expliqué cómo funciona el rating. De eso se trató la reunión, cómo funciona el people meter, las casas, y les mostré gráficos de cómo funciona. Ellos tenían inquietudes con respecto a los horarios.
—¿Consideras que eres algo así como un vanguardista incomprendido? —(Ríe). Comprendido sí, por la audiencia, no sé si vanguardista.
—Sólo el tiempo nos va a decir si estuvimos bien o no. Si tú no tienes la humildad y la paz interior de saber que ésta es una industria muy volátil, te sacas la cresta.